viernes, 14 de febrero de 2014

Lo olvidado


No hay nada nuevo bajo este cielo, sino lo que se ha olvidado.
G. Santayana

lunes, 10 de febrero de 2014

Taller de sueños



     Los sueños son las expresiones por excelencia en las que se muestran de una manera espontánea nuestros asuntos inacabados, aquello que no nos deja avanzar. De este modo, se tratan de “herramientas excepcionales” que nos permiten conocer en profundidad aquellas problemáticas sin solución en las que nos vemos enredados, posibilitando una mayor integración de las diversas partes de nuestra personalidad en aras a tener una vida más unificada, plena y con sentido.

    Cada elemento del sueño es significativo por sí mismo, no siendo más que una proyección parcial de nosotros mismos, y por lo tanto sólo haciéndonos responsables de ello, actualizándolo en el momento y situación presente, sólo así, estaremos estableciendo las bases hacía una vida más cohesionada y auténtica.


C/ Cristobal Lozano nº 20
02400 Hellín (Albacete)
 670037355

jueves, 6 de febrero de 2014

Estilos parentales


    La familia es el contexto social por excelencia en el cual se comienza a entender cómo es el mundo, el fundamento de las relaciones sociales, así como a configurar un sistema de valores personales y una identidad personal. Dicha trasmisión tiene lugar en un ambiente o clima familiar emocional que está marcado por el tipo de estilo parental utilizado por los padres. Los estilos parentales están formados por el conjunto de actitudes de los padres hacia el hijo que, consideradas conjuntamente, crean un clima emocional en dónde se expresan las prácticas educativas con las consiguientes consecuencias en el ajuste psicosocial de los hijos. A través de diferentes estudios se han obtenido cuatro estilos parentales.
  • El estilo autorizativo o democrático se caracteriza por la presencia de muestras de afecto, así como por el control y supervisión de los hijos mediante la razón y el diálogo, más que con la imposición. Este estilo es el que más se encuentra relacionado con un óptimo ajuste psicológico y conductual de los hijos: competencia y madurez psicosocial, elevada autoestima y autoimagen positiva, éxito académico, enérgicos, gran capacidad de autocontrol, capacidad empática, altruismo y bienestar emocional.
  • El estilo permisivo es característico de padres afectivos que conceden un elevado grado de autonomía a sus hijos sin restringir ni controlar su comportamiento. Las consecuencias de ello son hijos impulsivos, dependientes y con problemas de regulación emocional.
  • El estilo autoritario se caracteriza por valorar la obediencia y restringir la autonomía del hijo con escasas muestras de afecto. Da lugar a hijos conflictivos, irritables, descontentos y desconfiados, que presentan problemas de autoestima y autoimagen negativa. Poseen baja competencia social, malas estrategias interpersonales y bajo rendimiento académico. El excesivo uso de castigo físico aumenta las probabilidades de conductas delictivas.
  • El estilo negligente es característico de padres que se centran únicamente en sus propios intereses, proporcionando poco apoyo y afecto a sus hijos y estableciendo escasos límites de conducta. Hijos con escasa competencia social, problemas de comportamiento y agresividad, problemas de ansiedad y depresión junto a una baja autoestima, autoimagen negativa y falta de empatía. Es más probable que desarrollen comportamientos antisociales y/o delincuencia.
    Si bien en toda familia existen rasgos más afines o característicos de alguno de estos estilos parentales se pueden producir desplazamientos de un estilo a otro en función de las circunstancias, de las necesidades o momento evolutivo del hijo. Así pues, las familias prototipo no existen, sino que cada familia se encuentra más o menos próxima a un estilo concreto que a otros (Arias Orduña, Morales Domínguez, Nouvilas Pallejá & Martínez-Rubio, 2012).



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martes, 4 de febrero de 2014

¿Cómo afrontar la muerte?


Risoterapia


una herramienta de cuidados barata y sin efectos secundarios

La Risoterapia es una divertida disciplina terapéutica que consigue despertar en pocos minutos nuestra capacidad de sentir, de amar, silenciar nuestras preocupaciones, incrementar nuestra creatividad, sencillamente utilizando la risa como camino. Es una forma de alinearnos con el bienestar, la conciencia y la salud física emocional. 

En los talleres de risoterapia se utilizan diferentes técnicas que promueven la desconexión de nuestras preocupaciones a través del juego y el entrenamiento y que nos ayudan a liberar las tensiones del cuerpo y de la mente, para así alcanzar la carcajada.

Entre los beneficios de la risa se encuentran los siguientes:

a) Beneficios fisiológicos de la risa 
Favorece la digestión y evacuación a causa de las contracciones de la musculatura abdominal y la presión que ésta ejerce sobre las vísceras. 
Mantiene la elasticidad de las arterias coronarias gracias a la liberación de endorfinas y al incremento del ritmo cardíaco. Además, las endorfinas actúan como analgésico. 
Aumenta la capacidad pulmonar un 100% mejorando la respiración y posibilitando una mayor oxigenación y tonificación de la piel. 
La risa disminuye la presencia del colesterol en la sangre pues equivale a un ejercicio aeróbico. 
La risa favorece la digestión al aumentar las contracciones de todos los músculos abdominales. 
La risa facilita la evacuación debido al “masaje” que produce sobre las vísceras. 
La risa aumenta el ritmo cardíaco y el pulso y, al estimular la liberación de las hormonas “endorfinas”, permite que éstas cumplan una de sus importantes funciones, como es la de mantener la elasticidad de las arterias coronarias. 
La risa también ayuda a reducir la glucosa en sangre. 
Los huesos de la columna vertebral y las cervicales, donde solemos acumular las tensiones, se estiran. Lubricación y limpieza de los ojos con lágrimas. Las carcajadas hacen vibrar la cabeza, despejan la nariz y el oído. También elimina toxinas del organismo. 
Entra el doble de aire en los pulmones y la piel se oxigena más. 
Todos los especialistas coinciden que la risa es la mejor terapia para retrasar el envejecimiento cutáneo. Con los años, la musculatura del rostro tiende a relajarse y caer, y la mejor gimnasia es la risa, porque al reír sobre oxigenamos a las células y tejidos, logrando eliminar las ojeras y el aspecto cansado de la piel. 
Previene el infarto: el masaje interno que producen los espasmos del diafragma alcanza también a los pulmones y al corazón, fortaleciéndolos. 
Potencia la atención y la memoria 
Crea una sana fatiga que elimina el insomnio 
Relajación de los músculos, con un importante descenso del tono muscular. 

b) Beneficios psicológicos de la risa 
Si bien es importante tener presente que con la risa no disminuyen nuestras preocupaciones, sí cambia nuestro punto de vista ante las situaciones, haciendo que nuestras preocupaciones se vuelvan menos importantes, movilizándonos en la solución de las mismas. De este modo, es fácil comprender que la risa pueda afectar a nuestros pensamientos ya que nuestro estado de ánimo está íntimamente relacionado con ellos, creando en todo momento estados positivos emocionales y mentales. Es la fórmula más eficaz para la eliminación de pensamientos negativos. 
El mal humor mantenido constantemente, aún sin razón, al final produce sus frutos, y en personas introvertidas mucho más rápido, originando en un primer paso la tristeza y a largo plazo la depresión. Los pensamientos y las emociones negativas, cuando se mantienen constantemente originan los estados mentales patológicos, que al final siempre repercuten en el cuerpo con las diferentes enfermedades. 
La risa es contraria a los estados mentales negativos, que pueden ser el origen de las enfermedades mentales. En las manifestaciones emocionales intervienen muchos factores y las expresiones son uno de tantos. Si modificando conductas conseguimos más de un éxito, vale la pena recetar la risa ya que cuando reímos estamos cambiando nuestro estado mental. 
Posibilita la adopción de perspectivas más positivas y centradas en la solución de los problemas, en aquellas situaciones que nos crean malestar. 
Contribuye a amortiguar el efecto de emociones negativas como la ira, el miedo o la angustia, además del cansancio y agotamiento. 
Mejora las relaciones interpersonales reforzando la autoestima. 

Además, por si no fuera poco y relacionado con todo lo anterior, la risa es una de las formas más óptimas de romper las rigideces de nuestro ego ampliando nuestros horizontes.

El ego se sostiene sobre un conjunto de patrones conductuales, cognitivos y emocionales que no suelen ser muy flexibles produciendo que muchas de nuestras acciones no sean funcionales respecto a las demandas de las situaciones. Además, cómo confiamos en ellos de un modo bastante ciego, ya que configuran nuestra identidad, los valoramos a ellos mismos y a todo en general, y en particular a las cosas que actúan como las condiciones para poder desarrollarlos, invirtiendo gran parte de nuestra vitalidad en defenderlos. ¡Al fin y al cabo debe de ser así, ya que está en juego nuestra identidad de quienes somos o creemos ser! Y sin ella, ¡¿qué podríamos hacer?!

Por otro lado, la risa es capaz de resquebrajar este edificio mal construido en el que basamos nuestra vida y al hacer perder su seriedad, su supuesto valor sagrado, nos posibilita el acceso a nuevas perspectivas más clarificadoras en donde todo se ve con un nuevo color permitiéndonos re-enfocar y aclarar nuestros valores, o sea, que es lo que nos importa realmente y hacía dónde queremos dirigir nuestros pasos.

Así pues, la risa nos permite, al desbaratar nuestras defensas, mejorar las relaciones interpersonales, y lo que es muy importante, nos ofrece la oportunidad de perdonar a los demás y a nosotros mismos, de soltar resentimientos y rencores volviéndonos más ligeros, renaciendo como niños. Nos ayuda a mostrarnos más agradecidos, a apreciar todo lo bueno y bello que se nos ofrece a cada instante sin que nosotros hagamos realmente nada. Presente significa regalo. Es una gran puerta hacía la comprensión de que la felicidad o es compartida o no es, tomando conciencia de la interdependencia de todo. 

Si deseas comprobar por ti mismo todos los beneficios que se obtienen a través de esta sencilla y divertida terapia grupal contacta con nosotros y reserva tu taller de Risoterapia.


C/ Cristobal Lozano nº 20
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